Últimamente me gustan los viernes y no porque es el ultimo día laboral...
Los viernes para mi es el día que respira otro aire distinto de otros días de la sema. Ya no hay tantas prisas y las cosas salen lento y con paciencia. El sonido de los aspersores cada vez más lento y corto, la caída lenta de las últimas flores de jazmín, dejando todavía el olor dulce, la bajada suave de temperaturas – son los síntomas claros de OTOÑO. Al levantar la vista observo las nubes cargadas de tintas oscuras que están a punto de llorar las gotas frías y deseadas, pero el sol luchando con todas sus últimas fuerzas sigue sacando los rayos entre claridades del cielo. Y esta lucha continua entre los temporales me fascina...
Un día para pensar en algo creativo y todo un fin de semana para disfrutar!
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